Asimismo frenar dentro de un charco de agua podría ser muy peligroso, ya que el vehículo puede derrapar sin control o de igual forma al intentar un cambio de dirección se puede afectar el desplazamiento del vehículo de forma inadecuada y por lo tanto no tener suficiente control de la dirección. La información de CESVI aclara por otra parte que durante la lluvia generalmente se empañan los cristales del automóvil, cuando esto ocurre se recomienda usar el desempañador del parabrisas. Con el piso mojado, explica finalmente, el vehículo tiende a presentar una deficiencia al momento de acelerar, frenar o cambiar de dirección, por lo que se aconseja conducir a menor velocidad y con mayor precaución para evitar derrapes y pérdida de control. Mejor reemplazelos por unos nuevos. Con estos modelos también llega la filosofía Audi Ultra, la cual busca un menor peso para un mayor rendimiento.
Bebedor y golpeador, había contraído la sífilis tiempo antes del nacimiento de Cayetano. El niño vino al mundo con graves problemas de salud, de acción, durante sus primeros años de biografía estuvo varias veces al borde de la muerte a causa de una enteritis. La niñez de Cayetano transcurre en la calle, vagando. A partir de los cinco años concurre a varias escuelas de donde siempre es expulsado por su falta de interés en los estudios y su actitud rebelde.
Para animarlo a comer, su abuela se sentó frente a él y lo entretuvo con un cuento. Para vadear por cualquier puerta tenía que agacharse tanto como si estuviera haciendo besamanos a un rey. Pero su gran estatura era un lastre: una achaque de nacimiento y no una dicha. En algunas ocasiones le costaba aun caminar. Sentía mucha compasión por los pobres, los trabajadores y los enfermos. Era particularmente afecto a los niños de la aldea, y sus bolsillos grandes y profundos —del tamaño de sacos repletos de nabos— siempre estaban colmados de baratijas y golosinas. Empero el señorito Sardu era realmente un gigante amable, muy querido por su gente. La abuela le hizo un gesto con la cabeza para recordarle que tomara otra cucharada.