Aunque pensemos que todo se trata de mera intuición y saber cómo tirar frases o sugerir partes del cuerpo a través de un móvil, el 'sexting ' es toda una ciencia. El 'sexting' es similar al porno: una fantasía. El deseo de innovar, cambiar y potenciar su vida sexual es lo que las mueve a acudir a las clases de la sexóloga. Ella alquiló un estudio en Manhattan para empezar a enseñar a la gente cómo debía interactuar con el pretexto sexual de telón de fondo. Y sí, sobre todo para enseñarles a excitar a otras personas mediante el uso de la palabra. Es obvio que debes de tener mucho cuidado para no ofender a nadie. Este es uno de los grandes consejos de Engle para triunfar con cada uno de tus 'sexts'. La sexóloga pone el ejemplo de un abogado con el que estaba empezando a ligar.