El señor Paco me miraba con sus grandes ojos inocentes, donde brillaba una sonrisa de triunfo. Por supuesto que si Bismarck supiese lo que tiene encima, ya estaría ofreciéndome el dinero que quisiera Aunque sea de balde se lo doy yo al francés primero que al pruso El inventor quiso conmoverse. Ceferino, yo no tengo motivo para estar agradecido de los franceses.
El negocio de la prostitución se ha disparado con la crisis económica. Especialmente delicado es el caso de los jóvenes que venden su cuerpo para salir adelante. Hay que tener una formación», dice. Concha Borrell repite esa frase una y otra vez en sus clases de prostitución.
Sobre el autor Pues aquí pondré lo que se me vaya ocurriendo. Poca cosa, en general. Lo primero que se me pase por la cabeza. Lo que lea por ahí y lo que me cuenten en la barra de los bares o los amigos. Corrijo: sólo permitiré que se publiquen los comentarios que a mí me dé la gana y no daré ninguna explicación al respecto Karate Kid Con este frío y sin él, para qué mentir hay días que le llevo a Anusca el desayuno a la cama. Se toma el colacao y hablamos de nuestras cosas. Así crecen luego, claro, y se hacen estudiantes como éstos: Esto es en Zamora. Yo, que voy de vez en cuando a colegios e institutos, tengo la sensación rebelde. Hace poco un chico de unos quince que había leído una novelística mía levantó la mano y preguntó: «Oiga, me llama la atención que la primera frase de su novelística sea: «Para poner fin«.